Este complejo turístico y spa recientemente renovado se halla entre bellas montañas y una laguna tropical, en un lugar idílico para disfrutar de la auténtica Polinesia Francesa. El hotel enclavado entre casi 11 hectáreas de hermosos jardines ofrece 144 elegantes habitaciones y chalés, gastronomía local e internacional y una piscina infinita con bar acuático. Podrá nadar con los delfines, hacer kayak en las agitadas aguas, bucear en aguas turquesas o relajarse en el spa Hélène.